Soy el futuro de mi pasado, el pasado de mi futuro, la viva esencia de mi presente...

martes, 25 de noviembre de 2008

Intoxicación Adictiva


INTOXICACIÓN ADICTIVA



Succionada por delirios de colores, cubierta de hojas secas caminaba cerrando sus párpados. Bajo la sombra de sus sentimientos ella se refugiaba del cálido viento de la incertidumbre. Perseguida por su miedo a las situaciones nuevas y respuestas inesperadas...

Ella se imaginaba cómo él escribía en su computadora un escrito que probablemente nunca publicaría pues ese escrito era para él, para nadie más... Cada vez era más su desesperación que golpeaba las pequeñas teclas, su frustración también aumentaba con las ideas revoloteando en su cuarto, una canción hizo que sus lágrimas de desolación, tristeza y vacío no las pudiera contener, esas pequeñas cargadas de amor y tristeza una combinación perfecta de dolor.

Una migaja de pan ella encontró, la atesora como si fuera un pequeño oso de peluche para un niño. Deseos e ilusiones brotaron del olvido de colores. Ella haciendo crujir las hojas secas mientras brincaba de un lado a otro, mientras perdía la noción del tiempo. Sonidos deliciosos cubiertos de placer.

Sus lágrimas no cesaban de salpicar las teclas. Y ella imaginaba como un abrazo lo calmaba, por momentos... Sus ojos se encontraron, y la imagen se congelaba con un cálido beso que él robaba... Pero él seguía en su cuarto inundado por sus lágrimas.

Los azulejos diluidos estaban y el aire lo infectaba todo, los colores reducidos a sustancias ambiciosas, las letras se comían el tiempo y las memorias surcaban los universos divididos. La adicción a él es irrevocable y cubierta de migajas de pan.

martes, 11 de noviembre de 2008

Corazón Ambiguo




Visiones de contrariedad
Vértigo precipitado
Vagabunda mojada
Venganza sin temores

Ausencia de melosidad
Atisbo asesino
Acción frenética
Acantilado sin apreciaciones

Ciclo de frialdad
Cleptómana de miedo
Cementerio de la memoria
Cuchillo de muertes

Habitación de ingenuidad
Huellas de mi ombligo
Hojarasca atropellada
Historias dóciles

Alucinaciones de sobriedad
Acusaciones sin sentido
Antídoto para la desgracia
Amores accidentales

Destinada a la soledad
Deseos sin futuro
Delirios de tristeza
Delictivas relaciones

Milenios de culpabilidad
Manzanas de tiempo
Mirada confusa
Morbosas reacciones

Sustituida por la impulsividad
Sentimiento callado
Sonrisa perdida
Siluetas de perfecciones

Tragedias en la proximidad
Tristezas en el viento
Titubeos de alegría
Testarudas decisiones

domingo, 9 de noviembre de 2008

Sueños de Realidad

Quizá el título no me convence, pero bueno aquí se las dejo a los que quieran leer esta entrada.

Gracias por sus comentarios, son muy bien recibidos =).



Sueños de realidad.

El roce de tus labios dulces y tersos contra los míos es sólo un sueño.

Sentada bajo la sombra del árbol me imagino a tu lado con nuestras manos entrelazadas compartiendo el tiempo, el aire y los sentimientos, mientras me inclino lentamente para besar tus dulces labios. Pero solamente en sueños y delirios puedo sentirlo tan real. Quisiera poder tenerte a mi lado y quisiera que tú también lo desearas para que esta ilusa utopía se desvaneciera para cobrar vida.

Caminando sin rumbo fijo mi mirada se desvía ante la presencia del dulce aroma que me sentenció a muerte, dulces crímenes sin absolución alguna, condenada a muerte por intenciones reprimidas. Mi instinto me domina y pierdo el control al seguir el efluvio que desprendes inconsciente, sin saber que me dirijo a un acantilado. En la orilla recupero mis sentidos y dudo en seguir. Mi mente divagando se aleja y sin saber qué hacer me derrumbo y mis temores me consumen lentamente.

Ellos me retaron a estar a tu lado, me advirtieron que debía alejarme o seguir sin intención alguna de recibir algo de ti a cambio. Con precauciones sigo en el campo minado, pero debo ser aún más precavida pues en alerta me encuentro. Ella debe pensar que loca debo estar para continuar en el camino. Lucharé para conseguir lo que mi corazón desea y mi ser ansía.

El frío viento me advierte y me intenta persuadir para alejarme pronto del camino. Mi cara se hela con el viento, y mis dedos pierden la movilidad debo estas caminando en contra, pues de no ser así acogida en el cálido refugio debería estar, pero decidí ir en busca de ti. Quizá encuentre el calor que he buscado desde hace tiempo o quizá tenga que seguir el camino sin ti.

En un sueño debo pasármela pues tus besos me cobijan y me seducen.

Tu mirada me mata de tristeza cuando ellos a ti te sentenciaron a alejarte. Tus ojos claros e intimidantes son, pero en estos momentos inundados de tristeza se encuentran, pues desean ver tu felicidad sin tener la causa de ésta. Tristeza, tristeza, ¡¿Por qué simplemente no se puede estar alegre, no exijo completa felicidad, pero al menos una vida que no este impregnada de desdichas, y tristezas?! Unos ojos que me cohíben, los mismos que me hipnotizan y me enamoraron, tristes ahora se encuentran.

Dulces relatos de sueños imposibles, amargos relatos de la realidad, relatos incomprensibles que ocultan significados sin gran valor alguno. Todos ellos expresados sin algún otro fin que el de desahogarme, y quizá alguno que otro con el fin de transmitir, de ser descifrado por el lector correspondiente.

La música suena en mi interior, tranquila cuando tu te encuentras conmigo, cuando tu lejos te encuentras la música se vuelve un lío de notas sin sentido, y sólo cuando tu cerca de mi estás mi corazón se llena de esas dulces notas que crean un vacío que sólo tu ser puede llenar.

Lágrimas pueden haber, pero que yo he de detener. Gotas saladas que me torturan de vez en cuando para escapar y alcanzarte. Sin ellas posiblemente moriría pues ellas mi tristeza se llevan, y mi corazón se siente aliviado. El pequeño las seca y colecciona, fuerte es y a él acudo sin dudar.

Solamente tú me puedes decir si vale la pena seguir luchando. Pero si tú contestas que no vale la pena, entonces haré caso omiso a tu palabra y continuaré. Me dirás testaruda, orgullosa, y demás pero sé que valdrá el esfuerzo.

De nuevo estas ansias de llorar por desolación y alegría al mismo tiempo.

De regreso a mi casa me pregunto ¿por qué?, pero solamente le doy vueltas al asunto. Veo pasar ante mí miles de personas, y solamente por ti mi corazón se acelera. El cielo azul e imponente me llena de preguntas, y de respuestas. Inconsciente camino intentando alejarte de mi mente, para no perderme en el camino. El viento rozando mi piel me recuerda que debo seguir adelante.


Un cabello que alucino hasta en mis sueños me marea sin poderme mantener en pie.

Pronto me iré y de ti no me quiero alejar.


Silencios que enamoran,
Silencios sin final,
Silencios de ti,
Silencios de mí,
Silencios que han de venir,
Silencios que se alejan,
Silencios por ti,
Silencios que perduran,
Silencios de dolor.


El viento ha hablado. Las hojas lo confirman. Mis oídos lo escuchan. Mi corazón se tambalea.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Concentración

Un día azulado, bajo la sombra de la lluvia de oro un ser descansaba, recostado sobre el verde pasto húmedo por el rocío de la mañana. Sus pensamientos tranquilos, su corazón tranquilo latía rápido para distribuir el oxígeno y nutrientes por el cuerpo entero, sus párpados cerrados. Disfrutaba de la brisa de primavera en la ciudad entre tanto ajetreo.


En otro lugar no muy lejano Janit derramaba su dolor, tristeza y melancolía en un escrito sin tinta, mientras el cuarto se ahogaba en las notas y la lírica de Uninvited de Alanis Morrissette. Su corazón confuso estaba y su mente gritaba de desesperación al saber que ella no la escucharía. La realidad de la situación en la que se hallaba llenaba poco a poco su vacío en el estómago, mientras su tristeza la golpeaba intentando sofocarla. Janit se aferraba a su peluche pues al parecer era lo único que la escuchaba y la consolaba pues secaba sus lágrimas.


Elkium, el ser que disfrutaba de la brisa, su dolor superando estaba y planeaba abandonar pronto ese lugar tan tranquilo pues lo menos que sentía era que alguien lo entendía, pues se sentía solo, a pesar de tener personas que lo buscaban e intentaban comprenderlo y hacerle pasar un rato más ameno. Ni el maldito silencio le tranquilizaba, solamente lo hacía incomodarse más. Elkium al levantarse en un cuaderno de notas se puso a escribir pero pronto paró pues no le convencían sus escritos que sólo él entendía el verdadero significado.
Jist gi iwiy, lit mi hiri ind find yiir wiy ti himi. I niid ti bi ilini. Din't biliivi mi.

Janit pronto se tranquilizo aunque sus lágrimas corriendo seguían mientras manchaban sus escritos. Ella ante sus amigos y las demás personas parecía ser muy fuerte y parecía soportar cualquier cosa que le sucediera, pero la verdad era que ella anhelaba encontrar a alguien en quien pudiera confiar y la pudiera ver tal como era, para dejar de fingir. No era debil, pero tampoco era en todo fuerte, sólo era apariencia. Janit siguió ecribiendo aún sabiendo que no era la mejor escribiendo, pero siempre había escuchado y había comprobado que con la practica uno mejora y hasta llega a superar al maestro, aunque ella no tuviera un maestro en específico, al contrario buscaba a alguien aunque también era feliz siendo autodidacta.
Ge en jest kess the ene whe leke yee, there's netheng yee cen't lese. Den't ren ewey.

martes, 4 de noviembre de 2008

Lo siento...


Un triste adiós con voz resquebrajada ella me dio. Por un momento te escuche y por otro me bloquee, mi cabeza borró tu adiós de palabras y mi corazón titubeó al derramar una lágrima por tu adiós.
Sin entender bien el por qué, mi mente lo negó y mi corazón otra cortada sintió.

Pero lo único que quiero es que tú seas feliz, aunque a mi lado no estés, problemas ni dolor quiero yo causar, tampoco quiero que sufras.
Más no te dejaré ir a menos que tú me lo pidas y me digas que no me quieres…


Un nudo en la garganta
Un estómago fruncido
El apetito se fue
Mi vista al suelo regresó

Me dicen que exagero, pero es que no entienden y no pienso explicar esta Maldita Sensación.
Me dijiste que no me permitirías alejarme de ti, y yo te ayudaré a cumplir, pero no quiero causarte más problemas.

No me dejes con ella otra vez, compartir con ella el tiempo es una tortura y más aún pues, la Soledad me consume.

¿Por qué me lo dices acaso no ves que no quiero escucharlo?